Curso abierto de formación política sobre la teoría marxista del Estado y la revolución:
"La clase obrera y el poder político: ¿qué es el Estado?"
Martes 5, miércoles 6 y jueves 7 de agosto a las 18 hs en el local del Partido Obrero de Junín (Quintana 934).
A cargo de Julián Asiner.
Clase I. Su origen histórico.
- Las clases sociales y el surgimiento del aparato estatal.
- Características básicas y formas históricas del Estado.
- Crítica de la democracia.
Clase II. La lucha contra el Estado capitalista, el Estado obrero y su degeneración.
- Las lecciones de la experiencia: las revoluciones del siglo XIX y XX.
- La dictadura del proletariado, socialismo y comunismo.
- La degeneración del Estado Obrero y el estalinismo.
Clase III. La lucha por el poder en la actualidad.
- Imperialismo, crisis mundial y la cuestión del Estado.
- El argentinazo y sus enseñanzas: por un gobierno de los trabajadores.
- El debate en la izquierda.
Bibliografía optativa:
Marx, K., Prólogo de la contribución a la crítica de la economía política.
Engels, F., El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado.
Lenin, N., El Estado y la revolución.
Trotsky, L., La revolución traicionada.
organiza:
Partido Obrero de Junín
pojunin.blogspot.com
pojunin@hotamail.com
sábado, 26 de julio de 2008
DERRUMBE ‘NAC & POP'
Es la hora de sacar conclusiones estratégicas.
Con la renuncia de la espada más fiel del kirchnerismo, el jefe de Gabinete, suenan las campanas funerarias del proyecto ‘nacional y popular', que no tiene nada de lo uno ni de lo otro.
Un proyecto que vino a sacarle las papas del fuego a la clase capitalista aterrada por el derrumbe de 2001.
Kirchner propuso ‘reconstruir a la burguesía nacional'.
¿Qué tenemos?
Tenemos una patria sojera que se embolsa el 30 por ciento de la riqueza nacional, superexplota a los obreros rurales, evade los impuestos y destruye los bosques y el suelo.
Tenemos el rescate de Aerolíneas, por una cifra incalculable, que arranca de mil millones de dólares; los españoles festejan.
Tenemos la ‘argentinización' de YPF, con plata prestada por Repsol a un capitalista amigo del matrimonio.
Tenemos una deuda externa superior a la de 2001, ajustada por inflación.
Conclusión: Argentina es más dependiente que nunca del capital internacional.
Kirchner se propuso ‘construir poder desde arriba, el Estado'.
¿Qué tenemos?
Tenemos una camarilla de corruptos, como lo muestran Skanska, los superpoderes, los Taselli y un monto de subsidios que llegará al 50 por ciento del presupuesto nacional un aparato de patoteros.
Tenemos un ‘poder' que acaba de capitular en forma miserable ante el capital agrario de terratenientes, fondos financieros y arrendatarios capitalistas, por su negativa a movilizar al millón y medio de obreros rurales que se encuentra en negro y con salarios miserables.
Que acaba de ser ‘traicionado' por los radicales K y los peronistas S (por Solá) y R (por Reutemann), que han formado parte de las alianzas podridas y espurias del oficialismo.
Kirchner propuso ‘redistribuir los ingresos', lo que suena lindo, pero que en realidad significa proteger de cualquier ‘redistribución' el monopolio de la propiedad que se encuentra en manos de una pequeña minoría que ha saqueado al país.
¿Qué tenemos?
Un salario real con menor poder adquisitivo que en los '90.
Tres millones de trabajadores en negro.
Un régimen laboral más tercerizado y flexibilizado que nunca.
Una inflación galopante y un tercio de la población en la indigencia.
¿No es todo esto el toque de difuntos de esta parodia nacional y popular?
La capitulación del matrimonio presidencial ante la derecha y la patronal sojera es una seria advertencia para los trabajadores.
Una vez más la historia nos demuestra que no tenemos salida bajo la dirección de la burguesía nacional y de sus lacayos.
Que los gobiernos patronales pseudonacionalistas ponen en peligro nuestras conquistas, de ningún modo las acrecientan o defienden.
Que su acción miserable devuelve posibilidades a una derecha comprometida con los peores ataques y hasta atrocidades contra los trabajadores.
Es hora de conclusiones: construyamos mediante la deliberación y la lucha una alternativa obrera y socialista.
Con la renuncia de la espada más fiel del kirchnerismo, el jefe de Gabinete, suenan las campanas funerarias del proyecto ‘nacional y popular', que no tiene nada de lo uno ni de lo otro.
Un proyecto que vino a sacarle las papas del fuego a la clase capitalista aterrada por el derrumbe de 2001.
Kirchner propuso ‘reconstruir a la burguesía nacional'.
¿Qué tenemos?
Tenemos una patria sojera que se embolsa el 30 por ciento de la riqueza nacional, superexplota a los obreros rurales, evade los impuestos y destruye los bosques y el suelo.
Tenemos el rescate de Aerolíneas, por una cifra incalculable, que arranca de mil millones de dólares; los españoles festejan.
Tenemos la ‘argentinización' de YPF, con plata prestada por Repsol a un capitalista amigo del matrimonio.
Tenemos una deuda externa superior a la de 2001, ajustada por inflación.
Conclusión: Argentina es más dependiente que nunca del capital internacional.
Kirchner se propuso ‘construir poder desde arriba, el Estado'.
¿Qué tenemos?
Tenemos una camarilla de corruptos, como lo muestran Skanska, los superpoderes, los Taselli y un monto de subsidios que llegará al 50 por ciento del presupuesto nacional un aparato de patoteros.
Tenemos un ‘poder' que acaba de capitular en forma miserable ante el capital agrario de terratenientes, fondos financieros y arrendatarios capitalistas, por su negativa a movilizar al millón y medio de obreros rurales que se encuentra en negro y con salarios miserables.
Que acaba de ser ‘traicionado' por los radicales K y los peronistas S (por Solá) y R (por Reutemann), que han formado parte de las alianzas podridas y espurias del oficialismo.
Kirchner propuso ‘redistribuir los ingresos', lo que suena lindo, pero que en realidad significa proteger de cualquier ‘redistribución' el monopolio de la propiedad que se encuentra en manos de una pequeña minoría que ha saqueado al país.
¿Qué tenemos?
Un salario real con menor poder adquisitivo que en los '90.
Tres millones de trabajadores en negro.
Un régimen laboral más tercerizado y flexibilizado que nunca.
Una inflación galopante y un tercio de la población en la indigencia.
¿No es todo esto el toque de difuntos de esta parodia nacional y popular?
La capitulación del matrimonio presidencial ante la derecha y la patronal sojera es una seria advertencia para los trabajadores.
Una vez más la historia nos demuestra que no tenemos salida bajo la dirección de la burguesía nacional y de sus lacayos.
Que los gobiernos patronales pseudonacionalistas ponen en peligro nuestras conquistas, de ningún modo las acrecientan o defienden.
Que su acción miserable devuelve posibilidades a una derecha comprometida con los peores ataques y hasta atrocidades contra los trabajadores.
Es hora de conclusiones: construyamos mediante la deliberación y la lucha una alternativa obrera y socialista.
lunes, 21 de julio de 2008
Derogación de la 125: "El gobierno transfiere más de 4000 millones de dólares a los fideicomisos, acopiadores y patronales agrarios"
"El gobierno transfiere más de 4000 millones de dólares a los fideicomisos, acopiadores y patronales agrarios", declaró Jorge Altamira con relación a la derogación de la resolución 125.
El dirigente del PO cuantificó en ese monto la reducción de 12 puntos de las retenciones a la exportación, que resulta del decreto que deroga la 125, luego de voto en el Senado, "sobre la base, señaló, de un stock acumulado de soja de 36 millones de toneladas al 30 de junio pasado". Para Altamira, "el decreto derogatorio voltea el sistema de retenciones móviles, lo cual marca un enorme retroceso con relación a todos los proyectos alternativos que presentó la oposición en los debates en Diputados y Senado. En tal circunstancia, agregó, el levantamiento de la sesión del Senado, por parte del vicepresidente Cobos, luego de su voto de desempate, cuando debían haberse pasado a considerar los proyectos en minoría, resulta altamente sospechoso, porque habilitó con esta irregularidad el retorno a la retención fija del 35%. La reimplantación de la alícuota del 35%, sin transición, es funcional a la necesidad del gobierno de controlar el mercado cambio, ya que provocará una avalancha de exportaciones de los granos alcanzados por el decreto".
"La patronal sojera, en especial los mayores pulpos, han obtenido una victoria impensada para ella misma". Altamira concluyó con la observación "que esta enorme de transferencia de ingresos ni siquiera tiene fecha de vencimiento, como las que tenían las compensaciones del proyecto que fuera enviado al Congreso".
El dirigente del PO cuantificó en ese monto la reducción de 12 puntos de las retenciones a la exportación, que resulta del decreto que deroga la 125, luego de voto en el Senado, "sobre la base, señaló, de un stock acumulado de soja de 36 millones de toneladas al 30 de junio pasado". Para Altamira, "el decreto derogatorio voltea el sistema de retenciones móviles, lo cual marca un enorme retroceso con relación a todos los proyectos alternativos que presentó la oposición en los debates en Diputados y Senado. En tal circunstancia, agregó, el levantamiento de la sesión del Senado, por parte del vicepresidente Cobos, luego de su voto de desempate, cuando debían haberse pasado a considerar los proyectos en minoría, resulta altamente sospechoso, porque habilitó con esta irregularidad el retorno a la retención fija del 35%. La reimplantación de la alícuota del 35%, sin transición, es funcional a la necesidad del gobierno de controlar el mercado cambio, ya que provocará una avalancha de exportaciones de los granos alcanzados por el decreto".
"La patronal sojera, en especial los mayores pulpos, han obtenido una victoria impensada para ella misma". Altamira concluyó con la observación "que esta enorme de transferencia de ingresos ni siquiera tiene fecha de vencimiento, como las que tenían las compensaciones del proyecto que fuera enviado al Congreso".
jueves, 17 de julio de 2008
AYER UN JURAMENTO, MAÑANA UNA TRAICIÓN
En la madrugada del jueves quedó deshecha en un par de minutos la criatura más mimada del kirchnerismo: "la construcción de poder".
Con una resolución del ministerio de Economía, perdió primero a la patronal rural que lo votó en octubre pasado; después, durante 120 días, perdió la prueba de fuerza con ella en las rutas.
Al final, quebró a su mayoría parlamentaria en Diputados y en el Senado, y al propio vicepresidente, al que había llevado a ese lugar en nombre de una ‘concertación plural'.
Desde el comienzo dijimos desde estás páginas que se creaba "una crisis de régimen político", que se había "agotado el modelo productivo" y que "con estos no llegamos al bicentenario".
En el desarrollo de la crisis, el kirchnerismo demostró que era una pantomima de movimiento nacional y popular.
En ningún momento movilizó a los trabajadores del campo o de la ciudad, tampoco podía hacerlo porque gobernó con un millón de obreros rurales en negro, con topes salariales, con jubilaciones desvalorizadas y, al final, con una inflación imparable.
Apenas atinó a un par de provocaciones comandadas por D'Elía o Moreno en Plaza de Mayo, y a dos actos regimentados.
Los que llamaron a ‘parar a la derecha defendiendo al gobierno popular', se tienen que rendir a la evidencia de que el kirchnerismo ha sido una traba para la movilización de los trabajadores, rodeado de los Moyano, los Cavallieri y hasta los Venegas -o de los Scioli y los Alperovich.
Típicamente argentina, la crisis no tiene nada de heroica, trágica o dramática: es una pelea por 120 dólares de diferencia, por tonelada, por las 30 millones de toneladas acaparadas por la patronal sojera a partir de la suba de las retenciones.
Durante toda la crisis, sojeros y gobierno se mantuvieron unidos en la defensa de la estructura social terrateniente y monopolista del campo, y en el régimen de superexplotación del obrero rural; hubo innumerables modificaciones al proyecto de ley, pero ninguna por la derogación de la ley del peón rural de la dictadura.
Llambías, de CRA, gritó "Viva la Patria"a en Palermo, pero la consigna sojera es... "el restablecimiento de los mercados de futuro"; la Bolsa de Cereales de Rosario declaró, con esa reivindicación, un cese de tareas (especulativas), el miércoles pasado.
"Todos revolcados", la izquierda campestre se sumó a los festejos de los ‘procesistas' de la Rural por una votación de diputados y de senadores que han respondido fielmente toda su vida a las órdenes del capital.
¡El voto decisivo, del santiagueño Rached, fue ordenado por el banquero Ick, el gran patrón de la provincia y el verdugo de sus trabajadores!
No tiene tampoco nada de heroica la redistribución de ingresos que volvió a prometer K luego de cinco años de gobierno, como lo demuestra la decisión de cargar sobre las espaldas de los argentinos la deuda de mil millones de dólares del grupo Marsans por Aerolíneas.
El toque final de la farsa la dio el pobre Cobos, que justificó su decisión de votar en contra recordando con satisfacción los acuerdos que permitieron que las provincias privaticen los yacimientos petroleros y los que autorizan el subsidio de la patronal vitivinícola (francesa).
Se ha colocado como hombre de confianza para una salida ‘institucional' a la crisis de poder.
El gran ausente en todo esto ha sido el proletariado de la ciudad y del campo; pero la crisis recién comienza.
El gobierno ha perdido en el Congreso su mandato político, y no tiene condiciones de recuperarlo apelando a un nuevo voto popular; está fragmentado el propio Ejecutivo.
La oposición política patronal no querrá precipitar las cosas, en primer lugar porque está dividida y porque no ha liderado esta crisis sino que ha ido a su rastra.
Pero, por sobre todo, porque quiere que el ‘ajuste' lo haga este gobierno: cambiar las retenciones, aumentar tarifas, devaluar la moneda, reforzar los topes salariales, renovar los contratos con los pulpos internacionales suspendidos desde la ‘emergencia'.
El gobierno deberá decidir si quiere continuar; ahora como chirolita de la patronal sojera a la que estuvo ‘combatiendo' y de los pulpos que tienen cuentas pendientes con el Estado.
Los trabajadores debemos reunirnos para deliberar, en especial las corrientes obreras que se pronunciaron, en sindicatos y lugares de trabajo y estudio, contra los sojeros y el gobierno.
Montemos un gran frente único para superar la confusión entre los trabajadores y luchar por una alternativa obrera y socialista al derrumbe del régimen de turno.
Con una resolución del ministerio de Economía, perdió primero a la patronal rural que lo votó en octubre pasado; después, durante 120 días, perdió la prueba de fuerza con ella en las rutas.
Al final, quebró a su mayoría parlamentaria en Diputados y en el Senado, y al propio vicepresidente, al que había llevado a ese lugar en nombre de una ‘concertación plural'.
Desde el comienzo dijimos desde estás páginas que se creaba "una crisis de régimen político", que se había "agotado el modelo productivo" y que "con estos no llegamos al bicentenario".
En el desarrollo de la crisis, el kirchnerismo demostró que era una pantomima de movimiento nacional y popular.
En ningún momento movilizó a los trabajadores del campo o de la ciudad, tampoco podía hacerlo porque gobernó con un millón de obreros rurales en negro, con topes salariales, con jubilaciones desvalorizadas y, al final, con una inflación imparable.
Apenas atinó a un par de provocaciones comandadas por D'Elía o Moreno en Plaza de Mayo, y a dos actos regimentados.
Los que llamaron a ‘parar a la derecha defendiendo al gobierno popular', se tienen que rendir a la evidencia de que el kirchnerismo ha sido una traba para la movilización de los trabajadores, rodeado de los Moyano, los Cavallieri y hasta los Venegas -o de los Scioli y los Alperovich.
Típicamente argentina, la crisis no tiene nada de heroica, trágica o dramática: es una pelea por 120 dólares de diferencia, por tonelada, por las 30 millones de toneladas acaparadas por la patronal sojera a partir de la suba de las retenciones.
Durante toda la crisis, sojeros y gobierno se mantuvieron unidos en la defensa de la estructura social terrateniente y monopolista del campo, y en el régimen de superexplotación del obrero rural; hubo innumerables modificaciones al proyecto de ley, pero ninguna por la derogación de la ley del peón rural de la dictadura.
Llambías, de CRA, gritó "Viva la Patria"a en Palermo, pero la consigna sojera es... "el restablecimiento de los mercados de futuro"; la Bolsa de Cereales de Rosario declaró, con esa reivindicación, un cese de tareas (especulativas), el miércoles pasado.
"Todos revolcados", la izquierda campestre se sumó a los festejos de los ‘procesistas' de la Rural por una votación de diputados y de senadores que han respondido fielmente toda su vida a las órdenes del capital.
¡El voto decisivo, del santiagueño Rached, fue ordenado por el banquero Ick, el gran patrón de la provincia y el verdugo de sus trabajadores!
No tiene tampoco nada de heroica la redistribución de ingresos que volvió a prometer K luego de cinco años de gobierno, como lo demuestra la decisión de cargar sobre las espaldas de los argentinos la deuda de mil millones de dólares del grupo Marsans por Aerolíneas.
El toque final de la farsa la dio el pobre Cobos, que justificó su decisión de votar en contra recordando con satisfacción los acuerdos que permitieron que las provincias privaticen los yacimientos petroleros y los que autorizan el subsidio de la patronal vitivinícola (francesa).
Se ha colocado como hombre de confianza para una salida ‘institucional' a la crisis de poder.
El gran ausente en todo esto ha sido el proletariado de la ciudad y del campo; pero la crisis recién comienza.
El gobierno ha perdido en el Congreso su mandato político, y no tiene condiciones de recuperarlo apelando a un nuevo voto popular; está fragmentado el propio Ejecutivo.
La oposición política patronal no querrá precipitar las cosas, en primer lugar porque está dividida y porque no ha liderado esta crisis sino que ha ido a su rastra.
Pero, por sobre todo, porque quiere que el ‘ajuste' lo haga este gobierno: cambiar las retenciones, aumentar tarifas, devaluar la moneda, reforzar los topes salariales, renovar los contratos con los pulpos internacionales suspendidos desde la ‘emergencia'.
El gobierno deberá decidir si quiere continuar; ahora como chirolita de la patronal sojera a la que estuvo ‘combatiendo' y de los pulpos que tienen cuentas pendientes con el Estado.
Los trabajadores debemos reunirnos para deliberar, en especial las corrientes obreras que se pronunciaron, en sindicatos y lugares de trabajo y estudio, contra los sojeros y el gobierno.
Montemos un gran frente único para superar la confusión entre los trabajadores y luchar por una alternativa obrera y socialista al derrumbe del régimen de turno.
martes, 15 de julio de 2008
UN GOBIERNO INCAPAZ DE ENFRENTAR A LA DERECHA AGRARIA
Después de los actos de Palermo y de Congreso, queda claro que el gobierno es incapaz de derrotar la ofensiva política de la derecha agraria. Mientras que la clase media rural se movilizó masivamente tras los discursos reaccionarios de De Angeli, Buzzi y Miguens, el kirchnerismo fracasó en atraer a los trabajadores a su acto. Es que los Kirchner no tienen nada que ofrecerle a la clase obrera, tampoco una salida popular a la actual crisis nacional. En estos ciento veinte días, fueron impotentes frente al desabastecimiento y a la carestía impuestos por los monopolios agrarios y alimenticios. Si la clase obrera y sus aspiraciones estuvieron ausentes en Palermo, también lo estuvieron en Congreso. La jornada de hoy enseña que la escalada de la patronal derechista exige una política y un programa de transformación social, algo que está muy lejos del inmovilismo del gobierno.
Néstor Pitrola - Marcelo Ramal
Néstor Pitrola - Marcelo Ramal
Ni al acto patronal agrario y de la derecha frente a la Sociedad Rural. Ni al acto del Congreso con el gobierno de los monopolios.
Quienes fuimos brutalmente reprimidos en la Plaza de Mayo el lunes 7 de julio llamamos a todos los trabajadores y a todo el pueblo argentino a no concurrir ni a la Sociedad Rural ni al Congreso a los actos convocados.
Llamamos a no retirarse de los lugares de trabajo en función del paro patronal lanzado por Moyano, porque se opone a los intereses de los trabajadores violentados por la inflación y por los topes salariales y jubilatorios oficiales. Un gobierno que les garantiza a los patrones agrarios la explotación del peón rural en negro, con leyes de la dictadura y que salarialmente está un 40% debajo de la línea de pobreza. Un gobierno que rapiña los puntos de retención para el pago de la creciente deuda externa, es decir para la banca, un gobierno socio de los monopolios mineros, petroleros, pesqueros, telefónicos y automotrices.
En Palermo se manifestará la patria sojera de terratenientes y pools de siembra, de grupos aceiteros y compañías exportadoras, que acaparó millones de toneladas de alimentos en función de una rebaja de impuestos y un aumento de precios que contribuyeron a producir con sus secuelas de encarecimiento general de alimentos; se manifestará un frente al que se suma toda la derecha argentina para reclamar más tarifazos y rebajas de impuestos al capital.
Las organizaciones reprimidas por plantear la duplicación del salario mínimo y de las jubilaciones, un seguro al desocupado de $650; la nacionalización del comercio exterior y los puertos privatizados, de la gran propiedad terrateniente para repoblar el campo argentino, llamamos a realizar asambleas por este programa en todos los barrios en los que crece la pobreza, contra los punteros; en todos los sindicatos y lugares de trabajo y estudio, para unirnos en este perspectiva de lucha independiente.
POLO OBRERO
Llamamos a no retirarse de los lugares de trabajo en función del paro patronal lanzado por Moyano, porque se opone a los intereses de los trabajadores violentados por la inflación y por los topes salariales y jubilatorios oficiales. Un gobierno que les garantiza a los patrones agrarios la explotación del peón rural en negro, con leyes de la dictadura y que salarialmente está un 40% debajo de la línea de pobreza. Un gobierno que rapiña los puntos de retención para el pago de la creciente deuda externa, es decir para la banca, un gobierno socio de los monopolios mineros, petroleros, pesqueros, telefónicos y automotrices.
En Palermo se manifestará la patria sojera de terratenientes y pools de siembra, de grupos aceiteros y compañías exportadoras, que acaparó millones de toneladas de alimentos en función de una rebaja de impuestos y un aumento de precios que contribuyeron a producir con sus secuelas de encarecimiento general de alimentos; se manifestará un frente al que se suma toda la derecha argentina para reclamar más tarifazos y rebajas de impuestos al capital.
Las organizaciones reprimidas por plantear la duplicación del salario mínimo y de las jubilaciones, un seguro al desocupado de $650; la nacionalización del comercio exterior y los puertos privatizados, de la gran propiedad terrateniente para repoblar el campo argentino, llamamos a realizar asambleas por este programa en todos los barrios en los que crece la pobreza, contra los punteros; en todos los sindicatos y lugares de trabajo y estudio, para unirnos en este perspectiva de lucha independiente.
POLO OBRERO
lunes, 14 de julio de 2008
Ni al "zoológico" del capital rural, ni al camping de la burguesía kirchnerista
Las entidades patronales del campo han llamado “al pueblo y la ciudadanía” a movilizarse frente al zoológico, en territorio de la Sociedad Rural.
Kirchner llamó a una contramarcha, según él, "en defensa de la democracia".
Una vez más, el próximo martes esos dos bloques pretenderán partir en dos al pueblo argentino.
Pero los intereses de los trabajadores no estarán presentes, ni frente al Zoológico, ni en el camping de Plaza Congreso.
Las dos marchas pelearán por una única cuestión: quién se queda con los beneficios económicos de 30 millones de toneladas de soja que los capitalistas agrarios
mantienen retenidas en reclamo de menores impuestos (retenciones) y mayores precios.
Sólo por ese regateo, las dos marchas son "antagónicas".
Ni en el Zoológico ni en Congreso se van a acordar del millón y medio de peones rurales que trabajan en negro, que no tienen vacaciones ni descanso dominical, y cuyo Estatuto de la época de Videla legitima el trabajo de los menores.
Ni en el Zoológico ni en el Congreso se dirá una palabra sobre los fraudes fiscales de los monopolios cerealeros, por la sencilla razón de que sus organizadores son socios de esos fraudes.
Tampoco mencionarán la necesidad de poner fin a la estructura oligárquica del campo, donde el 2 por ciento de los capitalistas son dueños del 65-70 por ciento de la producción, y donde los terratenientes se benefician de un precio de más de 10.000 dólares la hectárea. ¡Pero que pagan un impuesto inmobiliario sobre una valuación fiscal de 120 dólares!
El "camping" oficial planteará la "defensa de la democracia", cuando el gobierno viene capitulando, con concesiones y prebendas económicas, ante los golpistas del "Zoológico".
En el Congreso y en el Zoológico, la policía de Kirchner y los fiscales de Macri, que hace una semana reprimieron en forma salvaje una movilización independiente en Plaza de Mayo, esta vez le abrirán paso de nuevo a piquetruchos y ruralistas.
El Partido Obrero llama a los trabajadores a darle la espalda a los dos actos; a restarle apoyo a su convocatoria y a sus programas capitalistas.
Discutamos un programa de la clase obrera frente a la crisis nacional:
Por la nacionalización del comercio exterior, de los puertos privados y privatizados.
Por la nacionalización de la gran propiedad agraria y el repudio de la deuda externa.
Salario mínimo equivalente a la canasta familiar, para los trabajadores de la ciudad y del campo.
Por la derogación del estatuto videlista del peón rural.
Kirchner llamó a una contramarcha, según él, "en defensa de la democracia".
Una vez más, el próximo martes esos dos bloques pretenderán partir en dos al pueblo argentino.
Pero los intereses de los trabajadores no estarán presentes, ni frente al Zoológico, ni en el camping de Plaza Congreso.
Las dos marchas pelearán por una única cuestión: quién se queda con los beneficios económicos de 30 millones de toneladas de soja que los capitalistas agrarios
mantienen retenidas en reclamo de menores impuestos (retenciones) y mayores precios.
Sólo por ese regateo, las dos marchas son "antagónicas".
Ni en el Zoológico ni en Congreso se van a acordar del millón y medio de peones rurales que trabajan en negro, que no tienen vacaciones ni descanso dominical, y cuyo Estatuto de la época de Videla legitima el trabajo de los menores.
Ni en el Zoológico ni en el Congreso se dirá una palabra sobre los fraudes fiscales de los monopolios cerealeros, por la sencilla razón de que sus organizadores son socios de esos fraudes.
Tampoco mencionarán la necesidad de poner fin a la estructura oligárquica del campo, donde el 2 por ciento de los capitalistas son dueños del 65-70 por ciento de la producción, y donde los terratenientes se benefician de un precio de más de 10.000 dólares la hectárea. ¡Pero que pagan un impuesto inmobiliario sobre una valuación fiscal de 120 dólares!
El "camping" oficial planteará la "defensa de la democracia", cuando el gobierno viene capitulando, con concesiones y prebendas económicas, ante los golpistas del "Zoológico".
En el Congreso y en el Zoológico, la policía de Kirchner y los fiscales de Macri, que hace una semana reprimieron en forma salvaje una movilización independiente en Plaza de Mayo, esta vez le abrirán paso de nuevo a piquetruchos y ruralistas.
El Partido Obrero llama a los trabajadores a darle la espalda a los dos actos; a restarle apoyo a su convocatoria y a sus programas capitalistas.
Discutamos un programa de la clase obrera frente a la crisis nacional:
Por la nacionalización del comercio exterior, de los puertos privados y privatizados.
Por la nacionalización de la gran propiedad agraria y el repudio de la deuda externa.
Salario mínimo equivalente a la canasta familiar, para los trabajadores de la ciudad y del campo.
Por la derogación del estatuto videlista del peón rural.
miércoles, 9 de julio de 2008
Masiva movilización en repudio a la represión
Más de 6.000 personas marcharon en la tarde de hoy para repudiar la brutal represión a la marcha piquetera que se dirigió a la Plaza de Mayo en la tarde del lunes. En la movilización de repudio, participaron las organizaciones de derechos humanos que integran el espacio "Memoria Verdad y Justicia", junto a representaciónes obreras, políticas y estudiantiles combativas. Al llegar a la Plaza, se volvió a leer el documento que presidió la marcha reprimida por el gobierno, titulado: "Ni con el gobierno de los monopolios, ni con los monopolios del campo". Al llegar a la Plaza, Néstor Pitrola, del PO, declaró: "El éxito de esta marcha demuestra que nuestros reclamos y nuestra movilización son más fuertes que las provocaciones represivas del gobierno. En un país donde desde hace cien días sólo se discute el regateo de la renta sojera entre dos fracciones capitalistas, nosotros llevamos a la Plaza la voz y el programa de los trabajadores, que son los grandes olvidados de esa disputa".
martes, 8 de julio de 2008
Comunicado del PO Junín frente a la represión en Plaza de Mayo
Comunicado de Prensa – 08/07/08
El Partido Obrero y el Polo Obrero de Junín repudian la brutal represión a la que fueron sometidos nuestros compañeros el día de ayer por parte de la Policía Federal en las inmediaciones de la Plaza de Mayo.
El gobierno reprimió, sin orden judicial, una movilización pacífica de trabajadores que quería instalar una carpa y una olla popular en la Plaza de Mayo por sólo 24 horas. No corrieron la misma suerte las carpas instaladas durante quince días frente al Congreso Nacional por parte del gobierno K y las patronales sojeras. Néstor Pitrola denunció que tal vez “por no ser ni propietarios de campos ni funcionarios del gobierno, hemos perdido el derecho a reclamar lo que es nuestro”.
La consigna que encabezaba la movilización de más de veinte organizaciones piqueteras era “ni con el gobierno de los monopolios, ni con los monopolios del campo”. Su convocatoria llamaba a los trabajadores a intervenir “con nuestras reivindicaciones y con una posición política independiente en la crisis”. Su programa recogía las demandas más sentidas de las barriadas humildes, allí donde el hambre y la pobreza hacen estragos como nunca.
Denunciamos que en también en Junín somos los trabajadores los que estamos pagando los platos rotos de la crisis con despidos, suspensiones y fundamentalmente con la confiscación que representa para nuestros salarios la inflación de los precios de los alimentos y combustibles.
Frente a la crisis fiscal del municipio, Meoni prepara una política que combina ajuste (paralización de las obras públicas, desfinanciamiento de la salud, la vivienda y la educación y salarios miserables para los trabajadores municipales) con impuestazo (solicitó al Concejo Deliberante un aumento de las tasas del 20%). Meoni quiere que sea la mayoría trabajadora la que pague con mayor carestía las cuentas del municipio.
El Partido Obrero y el Polo Obrero de Junín convocan a la movilización del día de hoy a Plaza de Mayo, en repudio a la represión, en defensa del derecho a la protesta, por el desprocesamiento de todos los luchadores y por la satisfacción de todos sus reclamos.
Asimismo, planteamos la organización de asambleas en los lugares de trabajo, de estudio y en los barrios para enfrentar el impuestazo de Meoni. Por un impuesto elevado y progresivo a los grandes capitales que financie un básico igual a la canasta familiar para los empleados municipales y un plan de obras públicas a cargo del municipio que le de una salida a los problemas de los barrios, las escuelas y los hospitales.
En cuanto a la conflicto entre el “campo” y el gobierno, defendemos una tercera posición, la de la unidad de los trabajadores de la ciudad y el campo por la nacionalización del comercio exterior, de la propiedad terrateniente y de los grandes monopolios, para poner la enorme renta de exportación minera, pesquera, petrolera y agropecuaria al servicio de la industrialización del país y de las necesidades populares. Por un salario equivalente a la canasta familiar para todos los trabajadores y un doble aguinaldo en julio para hacer frente a la inflación.
Copiamos abajo el documento conjunto de las organizaciones que había convocado a la marcha y al acampe del día de ayer.
Partido Obrero – Polo Obrero
Junín
pojunin.blogspot.com -- pojunin@hotmail.com
----------
NOS MOVILIZAMOS Y NOS DEFINIMOS ANTE LA CRISIS. MARCHAMOS A PLAZA DE MAYO.
¡¡Basta de Hambre!!
El conflicto que enfrenta al gobierno kirchnerista y a la patronal agraria es una disputa entre dos polos capitalistas ajena a los trabajadores. Ni las rentas de exportación, ni la caja fiscal destinada a la deuda externa y a subsidios a otros sectores empresarios van, ni irán, al bolsillo popular.
Estamos por la socialización de la riqueza, para que esta llegue a los trabajadores y el pueblo, conquista a la que solo es posible acceder, con una fuerte lucha.
Al contrario, esa renta la pagamos vía inflación todos los consumidores, incluidos los desocupados y los millones de trabajadores con salarios inferiores a la línea de pobreza. Proviene de los obreros rurales de quienes ninguno de los sectores en disputa se acordó en cien días de crisis, cuando el 70% de ellos están en negro, con una ley del tiempo de la dictadura de Videla y con remuneraciones menores a un tercio de la canasta familiar. Por otra parte la “patria sojera”, socia del gobierno, ha expulsado campesinos pobres y pueblos originarios que se organizan, luchan por su tierra y son reprimidos.
El “triunfo” de cualquiera de los bandos, al igual que un arreglo intermedio, entrañará más inflación, menos presupuesto para salud y educación, para viviendas populares, para todos los derechos universales del pueblo. Las “compensaciones” al capital las pagamos con privaciones. La inflación es anterior a este conflicto que la agravó, ahora los monopolios petroleros y de todo orden ejercen la liberación de precios y tarifas con el amparo del gobierno, incluidos los transportes que día a día aumentan en distintos lugares del país. En la Argentina de hoy de lo que se trata es de una salida al pueblo trabajador, no de la tasa de retenciones a un sector. De lo que se trata es de nacionalizar la propiedad terrateniente para ser explotada por los trabajadores y pequeños chacareros, repoblando el campo vaciado por el modelo sojero y garantizando la soberanía alimentaría. Se trata de recuperar el control de nuestros recursos naturales y estratégicos.
Las cúpulas de la CGT y la CTA capitaneadas por Moyano y por Yasky apoyan al gobierno, al igual que las organizaciones populares cooptadas hoy como aparatos clientelares y como fuerza de choque. La burocracia sindical rural y sectores internos de la CTA apoyan a la patronal agraria. Se arrogan una representación que no les reconocemos: impulsamos asambleas en todos los sindicatos y en todos los barrios populares.
Esa es nuestra propuesta para que la clase trabajadora y el pueblo intervengamos con nuestras reivindicaciones y con una posición política independiente en la crisis: por la nacionalización de todo el comercio exterior para volcar la enorme renta de exportación minera, pesquera, petrolera y agropecuaria a la industrialización del país, a los derechos básicos y fundamentales del pueblo, a la red ferroviaria que no tenemos, (y no para el tren bala), por el cese del pago de la deuda externa con el mismo fin, garantizando un plan de obras públicas y viviendas populares que acabe con la desocupación, la falta de techo y los alquileres impagables.
Nos movilizamos por:
• Trabajo. Que se otorguen puestos de trabajo en la obra publica para todos los desocupados. Blanqueo laboral general. Pase a planta permanente de los planes sociales. Por la derogación del estatuto negrero del peón rural.
• Seguro al desocupado universal de $650 (canasta de indigencia).
• Salario mínimo vital y móvil igual a la canasta familiar para los trabajadores de la ciudad, el campo, 82 % para los jubilados. Reapertura de las paritarias. No a los topes del gobierno y la burocracia. Doble aguinaldo en julio.
• Garantizar alimentos y energía para todos. Derogación del IVA en los productos de primera necesidad. Restitución de todos los comedores escolares, asignación mínima de $8 por comensal. Garrafas sociales a $10. Exención de pago de servicios para desocupados o trabajadores por debajo de la línea de la pobreza.
• Basta de represión, libertad a los presos políticos, desprocesamiento de los luchadores populares.
CONVOCAN:
POLO OBRERO, BLOQUE PIQUETERO NACIONAL (FTC-29 DE MAYO, MTR, UTL, MTR La DIGNIDAD, MOV BRAZO LIBERTARIO, MTR 12 de Abril, TODU), FRENTE TERRITORIAL 26 DE JUNIO (CTD ANIBAL VERON, MAR, MTR SANTUCHO, CPS 29 DE MAYO, MTR, MIP, MD VILLA GOLF, MN 1º DE MAYO), BOP (MOV 26 DE JUNIO, MTD QUILMES, TORRE, FUBADEYO, MTD Aníbal Verón (NF)).
El Partido Obrero y el Polo Obrero de Junín repudian la brutal represión a la que fueron sometidos nuestros compañeros el día de ayer por parte de la Policía Federal en las inmediaciones de la Plaza de Mayo.
El gobierno reprimió, sin orden judicial, una movilización pacífica de trabajadores que quería instalar una carpa y una olla popular en la Plaza de Mayo por sólo 24 horas. No corrieron la misma suerte las carpas instaladas durante quince días frente al Congreso Nacional por parte del gobierno K y las patronales sojeras. Néstor Pitrola denunció que tal vez “por no ser ni propietarios de campos ni funcionarios del gobierno, hemos perdido el derecho a reclamar lo que es nuestro”.
La consigna que encabezaba la movilización de más de veinte organizaciones piqueteras era “ni con el gobierno de los monopolios, ni con los monopolios del campo”. Su convocatoria llamaba a los trabajadores a intervenir “con nuestras reivindicaciones y con una posición política independiente en la crisis”. Su programa recogía las demandas más sentidas de las barriadas humildes, allí donde el hambre y la pobreza hacen estragos como nunca.
Denunciamos que en también en Junín somos los trabajadores los que estamos pagando los platos rotos de la crisis con despidos, suspensiones y fundamentalmente con la confiscación que representa para nuestros salarios la inflación de los precios de los alimentos y combustibles.
Frente a la crisis fiscal del municipio, Meoni prepara una política que combina ajuste (paralización de las obras públicas, desfinanciamiento de la salud, la vivienda y la educación y salarios miserables para los trabajadores municipales) con impuestazo (solicitó al Concejo Deliberante un aumento de las tasas del 20%). Meoni quiere que sea la mayoría trabajadora la que pague con mayor carestía las cuentas del municipio.
El Partido Obrero y el Polo Obrero de Junín convocan a la movilización del día de hoy a Plaza de Mayo, en repudio a la represión, en defensa del derecho a la protesta, por el desprocesamiento de todos los luchadores y por la satisfacción de todos sus reclamos.
Asimismo, planteamos la organización de asambleas en los lugares de trabajo, de estudio y en los barrios para enfrentar el impuestazo de Meoni. Por un impuesto elevado y progresivo a los grandes capitales que financie un básico igual a la canasta familiar para los empleados municipales y un plan de obras públicas a cargo del municipio que le de una salida a los problemas de los barrios, las escuelas y los hospitales.
En cuanto a la conflicto entre el “campo” y el gobierno, defendemos una tercera posición, la de la unidad de los trabajadores de la ciudad y el campo por la nacionalización del comercio exterior, de la propiedad terrateniente y de los grandes monopolios, para poner la enorme renta de exportación minera, pesquera, petrolera y agropecuaria al servicio de la industrialización del país y de las necesidades populares. Por un salario equivalente a la canasta familiar para todos los trabajadores y un doble aguinaldo en julio para hacer frente a la inflación.
Copiamos abajo el documento conjunto de las organizaciones que había convocado a la marcha y al acampe del día de ayer.
Partido Obrero – Polo Obrero
Junín
pojunin.blogspot.com -- pojunin@hotmail.com
----------
NOS MOVILIZAMOS Y NOS DEFINIMOS ANTE LA CRISIS. MARCHAMOS A PLAZA DE MAYO.
¡¡Basta de Hambre!!
El conflicto que enfrenta al gobierno kirchnerista y a la patronal agraria es una disputa entre dos polos capitalistas ajena a los trabajadores. Ni las rentas de exportación, ni la caja fiscal destinada a la deuda externa y a subsidios a otros sectores empresarios van, ni irán, al bolsillo popular.
Estamos por la socialización de la riqueza, para que esta llegue a los trabajadores y el pueblo, conquista a la que solo es posible acceder, con una fuerte lucha.
Al contrario, esa renta la pagamos vía inflación todos los consumidores, incluidos los desocupados y los millones de trabajadores con salarios inferiores a la línea de pobreza. Proviene de los obreros rurales de quienes ninguno de los sectores en disputa se acordó en cien días de crisis, cuando el 70% de ellos están en negro, con una ley del tiempo de la dictadura de Videla y con remuneraciones menores a un tercio de la canasta familiar. Por otra parte la “patria sojera”, socia del gobierno, ha expulsado campesinos pobres y pueblos originarios que se organizan, luchan por su tierra y son reprimidos.
El “triunfo” de cualquiera de los bandos, al igual que un arreglo intermedio, entrañará más inflación, menos presupuesto para salud y educación, para viviendas populares, para todos los derechos universales del pueblo. Las “compensaciones” al capital las pagamos con privaciones. La inflación es anterior a este conflicto que la agravó, ahora los monopolios petroleros y de todo orden ejercen la liberación de precios y tarifas con el amparo del gobierno, incluidos los transportes que día a día aumentan en distintos lugares del país. En la Argentina de hoy de lo que se trata es de una salida al pueblo trabajador, no de la tasa de retenciones a un sector. De lo que se trata es de nacionalizar la propiedad terrateniente para ser explotada por los trabajadores y pequeños chacareros, repoblando el campo vaciado por el modelo sojero y garantizando la soberanía alimentaría. Se trata de recuperar el control de nuestros recursos naturales y estratégicos.
Las cúpulas de la CGT y la CTA capitaneadas por Moyano y por Yasky apoyan al gobierno, al igual que las organizaciones populares cooptadas hoy como aparatos clientelares y como fuerza de choque. La burocracia sindical rural y sectores internos de la CTA apoyan a la patronal agraria. Se arrogan una representación que no les reconocemos: impulsamos asambleas en todos los sindicatos y en todos los barrios populares.
Esa es nuestra propuesta para que la clase trabajadora y el pueblo intervengamos con nuestras reivindicaciones y con una posición política independiente en la crisis: por la nacionalización de todo el comercio exterior para volcar la enorme renta de exportación minera, pesquera, petrolera y agropecuaria a la industrialización del país, a los derechos básicos y fundamentales del pueblo, a la red ferroviaria que no tenemos, (y no para el tren bala), por el cese del pago de la deuda externa con el mismo fin, garantizando un plan de obras públicas y viviendas populares que acabe con la desocupación, la falta de techo y los alquileres impagables.
Nos movilizamos por:
• Trabajo. Que se otorguen puestos de trabajo en la obra publica para todos los desocupados. Blanqueo laboral general. Pase a planta permanente de los planes sociales. Por la derogación del estatuto negrero del peón rural.
• Seguro al desocupado universal de $650 (canasta de indigencia).
• Salario mínimo vital y móvil igual a la canasta familiar para los trabajadores de la ciudad, el campo, 82 % para los jubilados. Reapertura de las paritarias. No a los topes del gobierno y la burocracia. Doble aguinaldo en julio.
• Garantizar alimentos y energía para todos. Derogación del IVA en los productos de primera necesidad. Restitución de todos los comedores escolares, asignación mínima de $8 por comensal. Garrafas sociales a $10. Exención de pago de servicios para desocupados o trabajadores por debajo de la línea de la pobreza.
• Basta de represión, libertad a los presos políticos, desprocesamiento de los luchadores populares.
CONVOCAN:
POLO OBRERO, BLOQUE PIQUETERO NACIONAL (FTC-29 DE MAYO, MTR, UTL, MTR La DIGNIDAD, MOV BRAZO LIBERTARIO, MTR 12 de Abril, TODU), FRENTE TERRITORIAL 26 DE JUNIO (CTD ANIBAL VERON, MAR, MTR SANTUCHO, CPS 29 DE MAYO, MTR, MIP, MD VILLA GOLF, MN 1º DE MAYO), BOP (MOV 26 DE JUNIO, MTD QUILMES, TORRE, FUBADEYO, MTD Aníbal Verón (NF)).
Declaraciones de Jorge Altamira ante la votación del proyecto oficial en Diputados
Jorge Altamira calificó de 'aborto legal y político' al proyecto votado por Diputados sobre retenciones.“Después de más de cien días de un conflicto que no tiene precedente, el Congreso votó un verdadero aborto legal pero por sobre todo político”, declaró el dirigente del Partido Obrero, Jorge Altamira.Al avanzar con su punto de vista, dijo: “lo prueba un solo hecho: los cacareados reintegros a los aún más cacareados ‘pequeños productores’ vencen en otros cien días, o sea en el nuevo periodo de siembra”. Según Altamira “el único propósito de la ley es incentivar la salida de los millones de toneladas acaparadas o retenidas durante el período de conflicto. No es claro incluso que lo logre. En este caso, se profundizaría la crisis cambiaria y la fuga de capitales”. “Este adefesio jurídico se convierte en una calamidad política para el oficialismo, cuando se observa que ha servido para liquidar la mayoría automática que respondía al Ejecutivo y abierto una crisis en el pejotismo recientemente rehabilitado por el ex Presidente Kirchner. Dicho de otro modo, se ha instalado una crisis política que compromete la capacidad de acción del actual gobierno”, indicó el dirigente. Para Altamira, “los reintegros que el llamado ‘campo’ se jacta de haber ‘arrancado’ no es sino otro esquema de subsidios y, por lo tanto, de corruptelas, porque incentiva al segmento que explota hasta, digamos, unas 5000 hectáreas al subdividir las explotaciones entre familiares y testaferros, lo cual privaría al Estado de retenciones equivalentes al 40% de la producción. En sentido contrario, la limitación de las compensaciones a las explotaciones de no más de 400 a 500 hectáreas, le quita posibilidades de expansión a la burguesía media del campo, que reinvertirá sus mayores utilidades fuera de la actividad agrícola para no verse penalizada por las retenciones previstas para explotaciones de mayores dimensiones. Las compensaciones no salvarán de la ruina a los sojeros más pequeños debido a la escalada de sus costos, que está vinculada a la suba de precios del petróleo y el gas”. “Los 257 honorables representantes del pueblo no encontraron ni un resquicio en sus largas deliberaciones para derogar la legislación que castiga al peón rural, ni para poner fin a las remuneraciones en negro, ni para tomar medidas contra la violación de la jornada laboral”, señaló el dirigente del PO. Asimismo llamó a participar "de la movilización piquetera del lunes 7 y martes 8 en Plaza de Mayo y la Plaza de los Dos Congresos".
viernes, 4 de julio de 2008
Meoni prepara un impuestazo
Inflación, salario y suspensiones
El conflicto entre el “campo” y el gobierno ha funcionado como un acelerador del proceso inflacionario. En Junín, los índices de los precios de los alimentos y de los combustibles (bien esencial ya que no existe transporte público) se han disparado produciendo una verdadera confiscación al salario real de los trabajadores. Son numerosos los reclamos gremiales en este sentido. Uno de ellos es el de los empleados municipales, que hace más de veinte días mantienen una carpa de protesta en la Plaza 25 de Mayo. El básico de los municipales no supera los $520.
Por otro lado, son varias las empresas que han decidido pasarles la factura de la crisis a sus trabajadores, a través de suspensiones, adelantamientos de francos y vacaciones sin ningún tipo de garantía horaria. Por ejemplo, Nidera ya ha suspendido a 50 trabajadores y los frigoríficos han amenazado con más de 200 despidos.
Crisis fiscal
Las consecuencias de la crisis nacional también han afectado las cuentas municipales. El intendente Mario Meoni denunció públicamente una disminución del 25% en la recaudación fiscal (Democracia, 19/06); al mismo tiempo, explicó que el aumento del 50% en el precio de los combustibles terminó por contabilizar un incremento promedio del 47% en el costo del total del los insumos del municipio (Democracia, 02/07).
La salida de Meoni: ajuste e impuestazo
Frente a esta situación, Meoni ha decidido paralizar la obra pública. “El municipio ajusta el gasto al máximo”, expresó (Democracia, 28/06) Según Eduardo Diotti, secretario general de la UOCRA, “el empleo en la construcción cayó un 40%” (Ídem). Por otra parte, SUTEBA ha denunciado que se encuentran paradas las obras edilicias en diversos jardines, en las escuelas primarias N° 21 y N° 18, así como en la escuela media N° 1, en las escuelas superiores de educación artística y en la escuela técnica N° 2, que aún no tiene edificio propio (Democracia, 29/06). Todo esto se suma a la parálisis del Plan Federal de Viviendas.
Pero esto no termina acá. Desde hace semanas, Meoni venía tratando de poner al conjunto de los juninenses contra los reclamos de los trabajadores municipales. Para conseguirlo, había amenazado diciendo que “para otorgar un nuevo incremento salarial es necesario aumentar las tasas” (LaTecla.info). Finalmente, tomó la decisión de solicitarle al Concejo Deliberante un aumento del 20% en las tasas municipales. De darse el impuestazo, Meoni estaría dispuesto a aumentar el salario de los municipales… “un 10% (¡!) en agosto o septiembre y antes de fin de año, un porcentaje similar” (Democracia, 28/06). De este modo, el básico municipal se llegaría recién a fin de año a los $624, aún por debajo de la canasta de indigencia que hoy se ubica en los $650.
La salida de los trabajadores
En conclusión, la política de Meoni es la de enfrentar la crisis fiscal con una combinación de ajuste (desfinanciamiento de la obra pública, la educación, la salud y la vivienda más miseria salarial) e impuestazo, cuyo aumento del 20% de las tasas lo pagaría la mayoría trabajadora con mayor carestía. De todas formas, Meoni promete esperar a “que se solucionen principalmente los problemas nacionales y que eso permita volver a una actividad económica plena para poder afrontar este tipo de cosas de la mejor manera” (Ídem). Sin embargo, él sabe que cualquier acuerdo entre el “campo” y el gobierno se terminará firmando sobre las espaldas de los trabajadores.
Contra esta ofensiva brutal contra la condiciones de vida de las masas, el Partido Obrero de Junín plantea:
- No al impuestazo. Por asambleas en los lugares de trabajo, de estudio y en los barrios para enfrentar el aumento de las tasas.
- Por un impuesto progresivo y elevado a los grandes capitales como Cargill y Nidera, que financie un básico igual al costo de la canasta familiar para los empleados municipales.
- Ningún despido ni suspensión. Garantía horaria del 100%. Aumento general de salarios para todos los trabajadores, que sean indexados mensualmente según la inflación para mantener cubierto el costo de la canasta familiar.
- Basta de inflación. Apertura de los libros de las empresas capitalistas.
- Nacionalización bajo control de los trabajadores del comercio exterior, de la propiedad terrateniente y de los grandes monopolios, para poner la riqueza al servicio de las necesidades populares y del desarrollo nacional.
Partido Obrero de Junín
pojunin.blogspot.com
pojunin@hotmail.com
El conflicto entre el “campo” y el gobierno ha funcionado como un acelerador del proceso inflacionario. En Junín, los índices de los precios de los alimentos y de los combustibles (bien esencial ya que no existe transporte público) se han disparado produciendo una verdadera confiscación al salario real de los trabajadores. Son numerosos los reclamos gremiales en este sentido. Uno de ellos es el de los empleados municipales, que hace más de veinte días mantienen una carpa de protesta en la Plaza 25 de Mayo. El básico de los municipales no supera los $520.
Por otro lado, son varias las empresas que han decidido pasarles la factura de la crisis a sus trabajadores, a través de suspensiones, adelantamientos de francos y vacaciones sin ningún tipo de garantía horaria. Por ejemplo, Nidera ya ha suspendido a 50 trabajadores y los frigoríficos han amenazado con más de 200 despidos.
Crisis fiscal
Las consecuencias de la crisis nacional también han afectado las cuentas municipales. El intendente Mario Meoni denunció públicamente una disminución del 25% en la recaudación fiscal (Democracia, 19/06); al mismo tiempo, explicó que el aumento del 50% en el precio de los combustibles terminó por contabilizar un incremento promedio del 47% en el costo del total del los insumos del municipio (Democracia, 02/07).
La salida de Meoni: ajuste e impuestazo
Frente a esta situación, Meoni ha decidido paralizar la obra pública. “El municipio ajusta el gasto al máximo”, expresó (Democracia, 28/06) Según Eduardo Diotti, secretario general de la UOCRA, “el empleo en la construcción cayó un 40%” (Ídem). Por otra parte, SUTEBA ha denunciado que se encuentran paradas las obras edilicias en diversos jardines, en las escuelas primarias N° 21 y N° 18, así como en la escuela media N° 1, en las escuelas superiores de educación artística y en la escuela técnica N° 2, que aún no tiene edificio propio (Democracia, 29/06). Todo esto se suma a la parálisis del Plan Federal de Viviendas.
Pero esto no termina acá. Desde hace semanas, Meoni venía tratando de poner al conjunto de los juninenses contra los reclamos de los trabajadores municipales. Para conseguirlo, había amenazado diciendo que “para otorgar un nuevo incremento salarial es necesario aumentar las tasas” (LaTecla.info). Finalmente, tomó la decisión de solicitarle al Concejo Deliberante un aumento del 20% en las tasas municipales. De darse el impuestazo, Meoni estaría dispuesto a aumentar el salario de los municipales… “un 10% (¡!) en agosto o septiembre y antes de fin de año, un porcentaje similar” (Democracia, 28/06). De este modo, el básico municipal se llegaría recién a fin de año a los $624, aún por debajo de la canasta de indigencia que hoy se ubica en los $650.
La salida de los trabajadores
En conclusión, la política de Meoni es la de enfrentar la crisis fiscal con una combinación de ajuste (desfinanciamiento de la obra pública, la educación, la salud y la vivienda más miseria salarial) e impuestazo, cuyo aumento del 20% de las tasas lo pagaría la mayoría trabajadora con mayor carestía. De todas formas, Meoni promete esperar a “que se solucionen principalmente los problemas nacionales y que eso permita volver a una actividad económica plena para poder afrontar este tipo de cosas de la mejor manera” (Ídem). Sin embargo, él sabe que cualquier acuerdo entre el “campo” y el gobierno se terminará firmando sobre las espaldas de los trabajadores.
Contra esta ofensiva brutal contra la condiciones de vida de las masas, el Partido Obrero de Junín plantea:
- No al impuestazo. Por asambleas en los lugares de trabajo, de estudio y en los barrios para enfrentar el aumento de las tasas.
- Por un impuesto progresivo y elevado a los grandes capitales como Cargill y Nidera, que financie un básico igual al costo de la canasta familiar para los empleados municipales.
- Ningún despido ni suspensión. Garantía horaria del 100%. Aumento general de salarios para todos los trabajadores, que sean indexados mensualmente según la inflación para mantener cubierto el costo de la canasta familiar.
- Basta de inflación. Apertura de los libros de las empresas capitalistas.
- Nacionalización bajo control de los trabajadores del comercio exterior, de la propiedad terrateniente y de los grandes monopolios, para poner la riqueza al servicio de las necesidades populares y del desarrollo nacional.
Partido Obrero de Junín
pojunin.blogspot.com
pojunin@hotmail.com
EL CONGRESO DE LAS FIERAS
El recurso del Congreso Nacional no sirvió para darle "más democracia a la democracia".
Después de una primera semana, en la que desfiló medio mundo e hizo uso de la palabra otro tanto, el empantanamiento es mayor que antes.
El gobierno prometió devolver la suba de retenciones que recaude a unos 80.000 productores y en un abrir y cerrar de ojos mandó al archivo su cacareada intención de redistribuir ingresos.
Los pulpos de siembra no quedarían afuera de esta ventaja si se las ingenian para registrar una segmentación de sus propiedades en unidades equivalentes a una producción de mil toneladas de granos.
Con este régimen de devoluciones de impuestos para el campo, el gobierno se convertiría en una máquina de subsidios, pues ya paga a otros sectores 30.000 millones de pesos al año, y los capitalistas se transformarían en su clientela.
"Ni soñando", le respondió la patronal sojera, en primer lugar, porque no quiere que le devuelvan lo que considera suyo y, en segundo lugar, porque considera al Estado su cliente y no al revés.
Para los capitalistas del campo, la suba de la tonelada de soja en el mercado internacional de 440 a 600 dólares desde marzo - un 40% en cien días- es toda de ella.
Cualquier otra cosa la considera confiscatoria, pero no el 21 por ciento de IVA que pagan los consumidores aunque el poder adquisitivo del salario caiga por la inflación.
Ante semejante panorama, el gobernador de las petroleras, Das Neves, se largó a reclamar libertad de precios para los combustibles.
El gobierno pierde su base social: salieron 6.000 millones de dólares, la inflación crece, las tasas de interés suben, la producción baja, aumenta la morosidad de los deudores con los bancos.
El matrimonio presidencial retrocede ante la presión sojera pero no satisface sus aspiraciones.
Se ha abierto una crisis política definitoria.
Cualquiera de los bandos capitalistas que gane le pasará la factura de la crisis al pueblo.
Los obreros tenemos que organizarnos con un programa propio para arrebatar el timón a estos desorganizadores de la vida nacional, que vienen perpetrando confiscación tras confiscación contra el pueblo en forma regular desde hace más de medio siglo.
Por la nacionalización de los pulpos agrarios y de exportación, y de sus puertos privados.
Por arrendamientos para chacareros y campesinos en función de un plan público de desarrollo agrario.
Por un salario agrario mínimo igual al costo de la canasta familiar y la libre organización sindical en cada finca o explotación. Fuera la burocracia de Uatre.
Basta de pagar la deuda externa usuraria, por la nacionalización de la banca.
Después de una primera semana, en la que desfiló medio mundo e hizo uso de la palabra otro tanto, el empantanamiento es mayor que antes.
El gobierno prometió devolver la suba de retenciones que recaude a unos 80.000 productores y en un abrir y cerrar de ojos mandó al archivo su cacareada intención de redistribuir ingresos.
Los pulpos de siembra no quedarían afuera de esta ventaja si se las ingenian para registrar una segmentación de sus propiedades en unidades equivalentes a una producción de mil toneladas de granos.
Con este régimen de devoluciones de impuestos para el campo, el gobierno se convertiría en una máquina de subsidios, pues ya paga a otros sectores 30.000 millones de pesos al año, y los capitalistas se transformarían en su clientela.
"Ni soñando", le respondió la patronal sojera, en primer lugar, porque no quiere que le devuelvan lo que considera suyo y, en segundo lugar, porque considera al Estado su cliente y no al revés.
Para los capitalistas del campo, la suba de la tonelada de soja en el mercado internacional de 440 a 600 dólares desde marzo - un 40% en cien días- es toda de ella.
Cualquier otra cosa la considera confiscatoria, pero no el 21 por ciento de IVA que pagan los consumidores aunque el poder adquisitivo del salario caiga por la inflación.
Ante semejante panorama, el gobernador de las petroleras, Das Neves, se largó a reclamar libertad de precios para los combustibles.
El gobierno pierde su base social: salieron 6.000 millones de dólares, la inflación crece, las tasas de interés suben, la producción baja, aumenta la morosidad de los deudores con los bancos.
El matrimonio presidencial retrocede ante la presión sojera pero no satisface sus aspiraciones.
Se ha abierto una crisis política definitoria.
Cualquiera de los bandos capitalistas que gane le pasará la factura de la crisis al pueblo.
Los obreros tenemos que organizarnos con un programa propio para arrebatar el timón a estos desorganizadores de la vida nacional, que vienen perpetrando confiscación tras confiscación contra el pueblo en forma regular desde hace más de medio siglo.
Por la nacionalización de los pulpos agrarios y de exportación, y de sus puertos privados.
Por arrendamientos para chacareros y campesinos en función de un plan público de desarrollo agrario.
Por un salario agrario mínimo igual al costo de la canasta familiar y la libre organización sindical en cada finca o explotación. Fuera la burocracia de Uatre.
Basta de pagar la deuda externa usuraria, por la nacionalización de la banca.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)