Pasadas las 18 horas del miércoles 24 de septiembre, luego de casi un día entero de incertidumbre, el gobierno dio un portazo en la cara de Baradel y Petrocini, y rechazó el acuerdo salarial que él mismo había ofrecido. Para ese momento, Suteba y la FEB ya le habían anunciado al gobierno de Scioli que el "87 por ciento de la docencia" había aceptado el nuevo ofrecimiento discutido con Oporto durante una semana de tregua habilitada a ese efecto.El acuerdo, después de mucho estudio significaba, literalmente, 3 pesos más de aumento (de 107 a 110 pesos de básico).La burocracia quedó ‘shockeada': había realizado un trabajo sucio implacable para hacer pasar este pacto ruinoso por medio en asambleas convocadas a las apuradas - de menos de 12 horas y de los que nadie se enteró- o por medio de consultas truchas. El gobierno arrojó al Frente Gremial de FEB-Suteba a un paro de 48 horas, convocado de urgencia, pero no con un espíritu de lucha sino para disimular el bochorno que significó el desplante gubernamental. Oporto se justificó: los dirigentes gremiales "se apuraron y aprobaron algo que no existía" (El Día, 24/9).Esta súbita agudización del conflicto docente muestra que las necesidades vitales de los maestros están sujetas a una interna política oficial que no tiene escrúpulos. Es la expresión de la implacable tendencia a la desintegración del kirchnerismo. Los rivales del gobernador le pasan la factura por su recule en el propósito de meter las manos de la Tesorería de la provincia en el IPS.
Exijamos la huelga general
Luego de más de dos meses de lucha, los docentes no tenemos resultados y encima nos largan esta provocación. Los burócratas van al paro de 48 horas con la ilusión de volver a recomponer negociaciones, o sea que seguirán con una política de desgaste. Si hay plata para el Club de París y para los fondos buitres disfrazados de ‘bonistas', si hay plata para arreglar con el Citibank, tiene que haber plata, prioritariamente para la educación y para los maestros. Tenemos que ir a la huelga general hasta obtener nuestras reivindicaciones, una huelga general hasta obtener el 24 por ciento de aumento en el básico que planteó como mínimo la FEB. Es necesario un Comité de Huelga conjunto de Capital y Provincia. Llamamos a los Suteba combativos y opositores, a los sectores combativos de ATE, judiciales, Cicop y Ademys a impulsar esta política.